Como expertos en pavimento continuo de hormigón queremos dedicar este post única y exclusivamente a este tema. Estos pavimentos tienen una base de morteros autonivelantes en bajos espesores. Por lo tanto, el tiempo de secado se reduce y la ejecución es también más rápida, además de no generar polvo. Estos pavimentos tienen la enorme ventaja de que son muy sencillos de limpiar y de mantener en perfecto estado haciendo que muy fácil la persistencia del brillo.
Los pavimentos continuos pueden tener como material base resinas epoxi, polímeros, metacrilato o poliuretano, además, por supuesto, del hormigón. Estos superan ampliamente en rendimiento a los suelos de cemento pulido y a otros pavimentos. Además de ser impermeables, no porosos y antideslizantes, no tienen juntas (de ahí lo de “continuos”). El hecho de que no tengan juntas los convierten en opciones mucho más recomendables desde un punto de vista higiénico. Por eso son idóneos para colocar en espacios donde se fabriquen alimentos.
Los pavimentos continuos Revestimientos para el Futuro aumentan la productividad y responden a las más altas exigencias mecánicas, químicas o estéticas. Atienden tanto a necesidades de resistencia como decorativas en grandes superficies comerciales y privadas. Están también especialmente indicados para lugares públicos como parques, plazas, centros comerciales u oficinas. En el caso de las zonas industriales, estos pavimentos destacan por su gran resistencia a la abrasión y al desgaste. Son adecuados para su aplicación tanto en exteriores como en interiores.
Las técnicas de instalación dependen del tipo de pavimento continuo de hormigón y de sus componentes. De hecho, según el lugar de aplicación se puede elegir entre una amplia gama de pavimentos industriales. En función de que sean para la industria metalmecánica, química, farmacéutica o alimentaria. En este campo de los pavimentos continuos, la innovación no tiene apenas límites y empresas como la nuestra investigamos siempre para dar con soluciones cada vez mejores que ofrecer al cliente.
Por supuesto, en todo caso responden a unas exigencias de seguridad muy altas. En este sentido y según las necesidades del cliente, los pavimentos pueden ser antideslizantes o antiestáticos. En cuanto a la estética, las posibilidades cromáticas son muy amplias además de poder elegir entre formas lisas o texturizadas.
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